No es de extrañar que nuestro subconsciente asocie la imagen de la hora del té a la vida cotidiana de las islas británicas, y es que puede que sea una de sus costumbres más arraigadas e identificativas, aun así si de expertos en cuanto a la tradición del té se trata nadie como la cultura china, y precisamente de esas tierras proviene este té tan curioso de tomar que quiero mostraros hoy.
Creo que el ser humano tiene la capacidad de crear arte desde los elementos más simples y cuando es capaz de convertir algo tan ordinario y cotidiano como tomar una taza de té en todo un espectáculo visual es merecedor de poseer esa etiqueta. Los Blooming teas son arreglos florales hechos con hojas de té cuyo interior envuelve una flor (por lo general crisantemo, jazmín, lirio o hibisco) y que secados conjuntamente adoptan la forma de un bulbo. La magia de este té se desvela al añadir agua casi hirviendo lo cual provoca que el bulbo se abra lentamente emulando una flor floreciente. Queda un poco en el aire si esta entretenida forma de disfrutar del té es un invento relativamente reciente de la cultura china, unos 20 años atrás, o si ya solía usarse este método en la antigüedad.
Recomendable infusionarlos en una taza o tetera de cristal para disfrutar de todo su esplendor los Blooming teas traen como ventaja, a diferencia de otras clases de té, el no aportar un toque amargo al agua cuando llevan bastante rato bañados. Puedes encontrarlos por un precio aproximado de 8€ los 100 gr. en páginas como esta.
Teaposy, marca líder en cuanto a Blooming teas se trata, ofrece este vídeo dónde podréis embelesaros con el florecer de este té: