Solomillo con Salsa de Cerezas

solomillo con cerezas 3

Después de unas merecidas vacaciones que han incluido visita al país germano y a mi tierra, Granada, regreso para compartir de nuevo con vosotros una receta con un producto de temporada tan veraniego como son las cerezas. Aunque ya desde finales de abril disfrutamos de las cosechas más tempranas  de este fruto es precisamente ahora cuando podemos encontrarlas en su mejor momento.

Ideales para elaborar confituras o recetas dulces (prometo tarta de cerezas en breve) esta vez he decidido incluirlas para bañar un solomillo, ya que combinan genial con esta carne.

~ Ingredientes ~

  • 1 Solomillo de cerdo.
  • 200 gr. Cerezas.
  • 4 cucharadas de azúcar.
  • 1 cebolla pequeña.
  • 150 ml. Vino tinto.
  • 150 ml. de fondo oscuro o caldo de carne en su defecto.
  • Sal.
  • Pimienta.

~ Elaboración ~

–          Deshuesamos las cerezas presionando sobre estas con la hoja de un cuchillo hasta que se rajen levemente y podamos sacar el hueso con facilidad y lo más libre de carne posible. Reservamos

–          Para esta receta suelo hacer uso de la cebolla rayada en lugar de picada porque me da mejor resultado, aunque podéis hacerlo de ambos modos. Añadimos un chorreoncito de aceite de oliva virgen extra, agregamos la cebolla, algo de sal para que comience a sudar y salteamos hasta que esté pochada.

–          Incluimos entonces las cerezas ya deshuesadas y salteamos un par de minutos a fuego medio. Cuando estas  vayan adquiriendo una textura algo más blanda vertemos el azúcar y salteamos de nuevo unos minutos hasta que terminen de cocinarse.

Camera 360

–          Llegados a ese punto añadimos el vino y el caldo. Recomiendo que uséis fondo oscuro si disponéis de él ya que potencia notablemente la salsa, pero si no podéis utilizar cualquier caldo de carne (intentemos siempre que sea casero). Cuando la mezcla comience a hervir reducimos a fuego lento y mantenemos cocinando durante 20 minutos.

–         Mientras tanto en otra sartén o en una plancha si lo preferís nos disponemos a marcar la carne, que dicho más extensamente es el proceso en el que sellamos la pieza a fuego muy caliente para que esta conserve el máximo sabor y riqueza a la hora de cocinarla. De este modo añadimos una mínima cantidad de aceite de oliva virgen extra en la plancha o sartén, calentamos a conciencia y nos aseguramos de que la carne se posa totalmente en esta cuando la incluyamos (podéis ayudaros de una espátula, por ejemplo).  Yo no suelo cocinar la carne mucho más allá de su marcado, para que quede lo más cercana posible a su punto, pero eso dependerá de cuan fanáticos de la carne poco cocinada seáis.

–         Prefiero que esta salsa quede algo espesa, pero si os agrada una textura más líquida añadid algo más de caldo para conseguirlo. Cuando la salsa haya terminado de cocinarse trituramos durante un par de minutos intentando que quede lo más homogénea posible. Si queréis un resultado mucho más fino pasadla por un chino antes de bañar la carne. Reservad y mantened caliente.

–          Cortamos el solomillo en medallones o rodajas, como deseemos, y napamos con la salsa.

solomillo con cerezas

Si buscáis un acompañamiento ideal para esta carne os recomiendo que probéis a hacer un puré de patatas y manzana Golden ¡Buenísimo!